Alafa: Es lo que estáis deseando recibir todos a final de mes. Porque alafa significa salario. Proviene del árabe clásico ‘alafah, que significa dieta. Esperemos que los “piadosos” empresarios se dignen a dar unos alafas dignos.
Alafia: hermosa palabra con un significado también hermoso, quiere decir perdón. Viene del árabe andalusí al’afya, que a su vez proviene del árabe clásico ‘afiyah, que puede significar misericordia y también salud.
Alahílca: Vaya palabreja. Una alahílca es una tapicería que adorna las paredes. En andalusí al’iláqa, y en árabe clásico ‘ilàqah, que tiene como raíz alaya que significa suspendido.
Alajor: Su origen es incierto, posiblemente venga del árabe hispano ‘asúr, que es período de diez días antes de la Pascua Grande en que se pagaban deudas y se hacían limosnas. También es una especia de tributo que antiguamente se pagaba a los sueños de los terrenos en donde se asentaban casas.
Alajú o Alhajú: Delicioso pastelillo que se elabora con pasta de almendra y relleno de frutos secos (nueces, piñones, etc.), pan rallado, especias y miel cocida. Dulce típico de Cuenca. Proviene del árabe hispano alhasú que a su vez deriva del árabe clásico hasw, que significa relleno.
Alamar: Es una presilla y botón, o bien un ojal sobrepuesto, que suele ir en la orilla del vestido o capa, bien para abotonarse o simplemente como adorno. Proviene del andalusí ‘alam que significa adorno en la ropa. Curiosamente en México su significado es totalmente distinto, ya que allí es una especie de pan dulce.