Los hooligans de un partido de izquierdas

El comportamiento de muchos militantes y dirigentes de Podemos es muy similar al que tienen los famosos hooligans de los equipos de fútbol. No se paran a pensar serenamente que está ocurriendo en la controversia que se está produciendo entre Sumar, o si quieren Yolanda Díaz, y Podemos –mejor dicho, parte de Podemos-.

Recurrir al insulto o la mentira no debería formar parte del discurso de nadie que se proclame de izquierdas. Y eso, desgraciadamente está sucediendo, con las manifestaciones en público y en redes sociales de muchas personas ligadas a la formación política morada.

El primero que lanzó insultos fue el líder podemita Pablo Iglesias, porque sigue siendo el que decide la estrategia a seguir por mucha dirección o secretaria general que tengan. El señor Iglesias acusó, sin nombrarla a Yolanda Díaz de ser una cobarde y una miserable por no haber mostrado un apoyo más explícito a Irene Montero y su ley del “si es si”. ¿Son esos los calificativos que debe utilizar un líder de la izquierda? ¿Cuándo ha insultado Yolanda Díaz a nadie de Podemos; todo lo contrario, y si no digo la verdad que alguien me lo demuestre.

Pero el señor Iglesias además miente cuando afirma que Yolanda Díaz no quiere unas primarias abiertas. ¿A que llama el señor Iglesias primarias abiertas? La propuesta de Podemos es que se acuerde en un despacho quienes serán los candidatos propuestos, y posteriormente hacer unas primarias entre estos candidatos previamente elegidos. Por su parte Yolanda Díaz propone unas primarias abiertas totalmente, en la que todos los partidos que integran Sumar puedan presentar sus candidatos a esas primarias. ¿Qué método es más democrático?

A lo peor es que el señor Iglesias y parte de la dirección de Podemos quieran controlar a los posibles candidatos, no vaya a ser que ocurra lo que en Asturias, que en las primarias venza la persona que no representaba al “aparato”, Covadonga Tomé, y como consecuencia esta se esté viendo ninguneada, sobre todo por la secretaria general de Podemos Ione Belarra.

Otra prueba del nepotismo del señor Iglesias. Rivas-Vaciamadrid es el único pueblo, con una población importante, gobernado por un partido a la izquierda de PSOE. En las anteriores elecciones los resultados fueron: IU siete concejales –entre ellos la alcaldesa Aída Castillejo Parrilla-, PSOE siete concejales, Podemos dos concejales. Ya se había llegado a un acuerdo entre IU y Podemos de Rivas para las próximas elecciones municipales, incluso había sido aceptado por Podemos Madrid. Pues bien desde la dirección central se ha ordenado que quede nulo este acuerdo. ¿Quién fractura la izquierda?

A Yolanda Díaz se le está llamando traidora. Veamos la verdad de esta afirmación. Yolanda Díaz nunca ha sido militante de Podemos – parece que muchos no se enteran que Unidas Podemos no solo lo compone la formación morada-, por lo tanto difícilmente alguien puede ser tratado de traidor a algo sin nunca a pertenecido a ese algo.

Pero hablando de traidores les voy a contar un hecho del que fui protagonista, no me lo ha contado nadie. Cuando estaba creándose Podemos, vinieron Iñigo Errejón y Juan Carlos Monedero a darnos una charla a los miembros de Asambleas Ciudadanas Somos Más del barrio madrileño de Aluche para que ingresáramos en Podemos. El propio Monedero me reconoció durante la conversación, y hay muchos testigos de ello, que habían creado Podemos porque no se habían podido hacer con el poder en IU. Por aquella época el señor Miguel Urban y la gente de Izquierda Anticapitalista, con la colaboración de Juan Carlos Monedero y Pablo Iglesias, entre otros, quisieron dar un golpe y hacerse con el control de IU, intento que fracasó. Tanto el señor Monedero como el señor Iglesias sí tenían relación con IU. ¿Quién es más traidor?

Posiblemente este artículo me cree algunas, o muchas, enemistades, pero siempre he antepuesto mis creencias a cualquier otra cosa sin reparar en el coste que esto supondría. Quizás algún hooligan me llamé fascista. Mi curriculum –del que casi nunca hablo- creo que demuestra lo contrario. Sufrí persecución durante el franquismo por ser miembro del PCE y la de la UDS (Unión Democrática de Soldados). Cuando vi la famosa foto de algunos dirigentes del partido con la bandera de los Borbones detrás, y conocí los acuerdos a los que se había llegado para la legalización del Partido, rompí con él. ¿Soy también un traidor?

Queridos compañeros de Podemos, reflexionad, pensad por vosotros mismos sin seguir las arengas de ningún “profeta” y sacad vuestras propias conclusiones.

José Luis Garrot Garrot
José Luis Garrot Garrothttps://asambleadigital.es
Historiador y arabista. Profesor de la UCM

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